Práctica 12. Taller "Propuestas para el desarrollo competencial de la Didáctica de la Lengua y la Literatura", a cargo de José Hernández. Por Daniel Arce.
Práctica 12
Taller "Propuestas para el desarrollo competencial de la Didáctica de la Lengua y la Literatura", a cargo de José Hernández.
En la sesión del lunes 15 de mayo, asistimos al taller de "Propuestas para el desarrollo competencial de la Didáctica de la Lengua y la Literatura", a cargo de José Hernández Ortega. Este docente, profesor de instituto, doctor en Ciencias de la Educación y profesor de la Universidad Complutense posee un currículum realmente sorprendente, por lo que ya preveíamos que la calidad de este taller sería notable. No obstante, consiguió superar nuestras expectativas como asistentes, ya que fue una sesión dinámica, desarrollada sobre contenidos muy bien organizados, y en la que las habilidades comunicativas del ponente fueron excelentes.
Desde mi punto de vista, me agradó especialmente que José Hernández partiera de la premisa de que la innovación sólo es beneficiosa cuando tiene una utilidad real dentro del aula. Partiendo de esta idea, con la que concuerdo absolutamente, se nos propusieron una serie de recursos y herramientas didácticas a lo largo de la sesión que, a mi modo de ver, podrían tener un desempeño muy positivo en una clase de lengua y literatura castellana.
En la primera parte de la sesión, el profesor se centró en dejar claras las competencias que siempre, como docentes de lengua y literatura, debemos trabajar con nuestros alumnos: hablar, leer, escribir y escuchar. Se nos preguntó en cuál creíamos destacar más, y esto sirvió para establecer un patrón común de las virtudes y deficiencias del sistema educativo de España. A raíz de ello, se nos preguntó también cuáles habían sido los docentes que más nos habían marcado durante nuestra etapa estudiantil. Esto nos sirvió para llegar a una conclusión irrebatible: que las habilidades comunicativas y la empatía son los elementos esenciales de un buen docente.
En este sentido, se nos pidió también una lista de las habilidades que, como alumnos, considerábamos que debía tener un profesor ideal. Estas fueron las que yo expuse:
1. Ser empático con sus alumnos.
2. Tener sentido del humor.
3. Ser honesto intelectualmente, no fingir que conoce o le gusta todo aquello que enseña.
4. Dominar la materia que imparte.
5. Ser paciente y saber controlar sus emociones.
6. Saber trabajar en equipo.
7. Creer en su trabajo.
8. Ser equitativo y trabajar por la igualdad de oportunidades.
9. Ser justo, dar a cada alumno lo que se merece.
10. Formarse permanentemente y no dejar de estudiar nunca.
Como segunda actividad, realizamos un ejercicio cooperativo de comparación entre dos cuadros —Las tres gracias, de Rubens, y Las señoritas de Avignon, de Picasso—, con el que se pretendía ofrecernos un recurso para trabajar todas las habilidades comunicativas de nuestros alumnos en una misma actividad.
En la última parte de la sesión, se nos habló de una serie de herramientas digitales que pueden utilizarse dentro del aula y que integran muy bien el componente lúdico en la enseñanza: Socrative y PalabRETO. La primera resulta muy útil para analizar la asimilación de contenidos en todo tipo de temas. En nuestro caso, lo hicimos con sintaxis de nivel básico, con catastróficos resultados por nuestra parte. PalabRETO, por otra parte, es una herramienta excelente para trabajar el vocabulario, y puede resultar muy útil sobre todo en los niveles más elementales de la educación secundaria. Por último, se nos planteó una actividad para mejorar visualmente nuestras presentaciones, utilizando para ello el knolling literario que os adjunto a continuación.
En conclusión, el taller de José Ortega me pareció una ponencia excelente, principalmente por dos razones. Por un lado, por las habilidades comunicativas y por el contenido tan valioso del que hizo gala el profesor durante la sesión. Por otro lado, por el equilibrio perfecto que encontró entre la aportación de contenido teórico y las experiencias personales en su labor como docente.
Me alegra que te haya gustado el taller. Buen resumen.
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